Lo siento, esto no tenía por qué acabar así...
Déjame marchar. Acaba con esto antes de que lo haga yo...
¡No, no lo hagas! ¡NO, NO! ¡Te quiero!
Lo siento... ¿puedes oírme? Esto no puede estar pasando.
Hay demasiado silencio ahora...
Esto va a herirme más a mi que a ti.
Espérame, iré contigo. Mientras queden ganas, seguiremos.
Tócame, pruébame, siénteme.
Por favor... ayuda.
La única verdad ahora es lo arriesgado.
No te dejaré saltar solo.
Acompáñame en la caída. Afrontemos el golpe, y volvamos a aquel día en el que nos besábamos sin fin a la vista.
Hay dos caminos: podemos amar, o podemos llorar. Lo pensaremos, repensaremos y nos comeremos el coco buscando el modo de tragarlo, y para cuando queramos darnos cuenta, habremos saltado ya.
¿Podrías besarme en plena caída, o tendría que explotar y esperar el golpe para volver a retomar ese acantilado? Al llegar al agua, volveré a arder en tu fuego.
Me ha dado de lleno tu entrada, ha sido muy buena, muy intensa supongo.
ResponderEliminarGenial, de veras.
Pero, prefiero amar.
Hola. Me llamo Espe. Echo de menos a mi madman y le voy a hacer el repertorio entero de caritas con lengua en cuanto le pille.
ResponderEliminarYo también prefiero amar :)
ResponderEliminarMuchas gracias, te sigo!!
PD: Espe tengo 3245369784203432 ganas de verte y eso que ya sabes ijijji jajajajajaa