Mis sentidos buscan tu calor, aquel que haga arder mi fuego y nacer de él mismo.
Yo mismo.
Me doy miedo. Miedo a ver como me quemo, renazco y vivo hasta morir.
Miedo a lo desconocido, a lanzarme a un mundo sin luces, solo con mis llamas y una sonrisa resplandeciente allá a lo lejos. Un objetvo deseado, el Fruto del Edén en mis manos.
El paraiso de tus labios, tu verdad y mi fuego ardiente, creador de amor y más amor.
Pero... ¿ya has visto el miedo en mis ojos?
¿Has sentido mis besos al rozarte el viento en las mejillas?
¿Has... escuchado mi latir?
Tu corazón. Quiero encontrarlo.
Quiero escuchar como todo lo que tenemos y nos prometemos grita hacia el cielo, hacia mis tiburones en el mar de sentimientos.
Podremos andar juntos el camino de la vida, juntos hacia lo que llamamos Cielo.
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