Arrghh!! Sube una corriente eléctrica por mi columna vertebral; intento respirar pero se quiebra el aire... intento andar pero me crujen los huesos.
Intento amar pero me arde el corazón... prometo que mañana no volveré para escuchar tus palabras.
Mientras ese electricismo cruza mi eje central, una imagen acude en busca de calma a esta tempestad, acude una tormenta en busca de calor a este corazón. Acude a mí una mentira en busca de verdades que camuflen esa capa de sentimientos rotos y miradas perdidas. Esa orden de derribo...
Nos vamos; me voy. Nada me ata a este lugar después de escuchar el mañana.
Estallamos y la lágrima que queda se perdió en la intensidad del mar.
Soy una píldora en tu lengua, esperando a que me tragues y haga de las mías en tu interior más interno.
Y es que, la verdad por delante: nada está bien; gracias por preguntar.
Todo es paranoico en mi interior, la melodía que debería tranquilizarme me tira de los pelos, me asfixia el aire al romperse y se consume el agua que debería fluir por nuestros labios.
Todo es ausencia; ahora queda el momento que no existió, el nada que me diste y el todo que ofrecí. Me da rabia que siempre la misma rutina ande rutineando por mi día a día, creo que no pido demasiado... ¿no?
No quiero un amor de película, de esos con predecible final, no quiero comer perdices por que siempre cabe la posibilidad de que se extingan, tampoco quiero echar el ancla en tus aguas... quiero pasar las horas nadando mar adentro.
Y en la nada, el todo llegó a su máximo esplendor. De la nada nació el silencio que gobierna esta tumba. Del todo murieron los androides que mecanizaban este cuerpo. Con sus restos se creó un Androide Paranoico que liderará estas manos hoy por hoy.
El cuerpo desnudo calló su lujuria.
Los pecados tomaron nombre y apellidos propios, y volví a dejar entrar la tristeza a este castillo de puro sentimiento. Volví a dejar ver la agonía al final de este sendero, volví a sentirme humillado, roto, solo, insuficiente, injusto, acojonado, cobarde, egoísta. Volví a maldecir el día en el que elegí esta elección, el dia en el que no elegí nuestra elección.
Volví a sentir que lo que recibo no es equivalente a lo que doy.
Pero esto es lo que conseguiste, soledad, esto es lo que has echo de mí.
Un minuto a tu lado y pierdo mi razón, un segundo de tu mano y mi sangre corre loca de pasión.
Un mirar a lo más profundo de nuestros ojos, y se cae a pedazos este castillo. Ahora queda esperar el derribo.
¡Detengan a ese loco o perderá la cabeza!
¡¿Qué demonios está haciendo (aquí)?
Bahh, chorradas...
Maldita policía del corazón, siempre persiguiendo a los delincuentes equivocados.
cada vez te superas más, pablo.
ResponderEliminarcada vez más artista, más enrevesado.
la foto no da lugar a dudas, y el texto menos.
oh venga, me encanta, es de las mejores que he leído nunca,pero la foto me da un trauma enorme, ME ENCANTA.
ResponderEliminarte sigo obvisimamente -no, esa palabra no existe-
www.fabismile.blogspot.com
la foto es un poco tetrica la verdad jajaja
ResponderEliminarmuchas gracias!! yo tambien te sigo :D
odio que el amor no sea un sentimiento claro y preciso...las variantes que nacen de él siempre dan lugar a hervideros de cabeza y pensamientos que no deberían ser.
ResponderEliminarun beso pablo, te sigo claramente. :)
:D
ResponderEliminarHOLA, VENGO A PRESUMIR DE QUE PABLO ME LEYÓ ESE TEXTO POR TELÉFONO Y FUE UNA EXPERIENCIA ERÓTICO-LITERARIA ÚNICA e_____________e
ResponderEliminarY volviendo a la seriedad, Madman, en serio, es flipante como consigues que todos mis sentidos se concentren en tus textos. Eres increible, y este ha sido uno de los mejores que has escrito.
Te quiero Pablox:)
sé que te encantó baby :))
ResponderEliminarte quiero mucho expe :D y mil gracias, de nuevo