Cada frase alberga una historia distinta. Las letras dejan huellas que las palabras siguen para que tú puedas vivir en su historia. Disfruta cada paso.

jueves, 8 de julio de 2010

Me vuelvo valiente, y te beso en los labios...

Ella, tan simple y peligrosa, tan débil y con coraza tan impenetrable.
Cualquier día, no necesita más que tu sonrisa para que sea especial, está comprobado.
Yo te doy la mía, por si acaso la necesitas... :).
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Camina en busca de su olor. Han quedado en el metro a las 6 de la tarde. Buena hora para derretirse por las calles de Sevilla...
Pero, da igual, me derretiré igualmente cuando la vea.
Y allí estás. Tan magnifica como siempre, tan dulce y adorable…
ojalá supieses como aumentan mis latidos cuando te acercas. Deberían multar a mi corazón por exceso de velocidad.
En fín, que recuerdo más bello... pero a la vez trae tanta nostalgia.
¿Cómo pude dimitir? Soy tan estúpido... debería haber seguido caminando por tu sendero...
¿Cómo puedo olvidarlo? Ahora, en cambio, soy suficientemente sensible como para guardarlo en mis archivos preferidos.
Ese momento, en el cual nuestros labios se rozaban mientras mi corazón quería hacerse notar en mi pecho. Te noto tan cerca... terremotos azotan toda mi estabilidad.
Sí, en ese momento, justo ahí...
OH...FUCK.

No debería adentrarme ahí, justo en ese momento. Sé que tus manos no me tocan, y me hace sentir mal, me hace sentir nostalgia...
Es tan inevitable, caer en pedazos rodando por la escalera que lleva al cielo... tan difícil subir y tan fácil caer.
Si regresara a ese momento, a esa dulzura... volvería a buscarte a aquella estación, derretido, ardiendo, emocionado, nervioso, con un beso en la punta de la lengua...
no encuentro la palabra exacta.
Me has ganado... tú, que llegaste sin avisar a mi vida, y ahí te has quedado.

Es extraño, creía que esto no era real, una simple ilusión en la noche, pero sin ti, la situación se desmadra hasta hacer que cambie de opinión. Es real, en lo más profundo del alma.

Se que eres la pieza que falta en mi corazón, y sin ti… mi alma, mi cuerpo, mi voz, mi mirada, mis besos… no tienen sentido.

Lo que daría por ver tu mirada en mis ojos… mientras todo gira alrededor de nuestros labios fundiéndose en el beso más hermoso que pueda imaginar una simple mente.

… ojala, fuese tan valiente como para hacerlo.




















¿Creamos nuestro propio tiempo?





3 comentarios:

Transeúntes...