Cada frase alberga una historia distinta. Las letras dejan huellas que las palabras siguen para que tú puedas vivir en su historia. Disfruta cada paso.

martes, 27 de febrero de 2018

Qué vienen a buscar, sin contar la sangre, los habitantes de la piel; a ti, vida, me vuelvo a dirigir. Dame el mensaje y yo lo descifraré; con sangre o con tinta lo haré. Clavado en mi piel con fauces de parásito, chupando de mi energía y de mi conciencia.

'sigue'

Será que entre las líneas de mis noches se oculta siempre el significado, estando alerta pero tras semanas sin escribirte; vida, a ti, que animas mi conciencia.

Sigo, busco, escribo; vivo, a ti, vida, te vivo despierto, te siento en mis sueños, como un gato humano que ronronea en el salón de mi padre donde una fábrica de juguetes sexuales comienza a surgir en el patio y un hombre que me seduce en comunión me cuenta, con tu mensaje, el significado que duerme entre las líneas

lunes, 26 de febrero de 2018

Alas rotas, ojos oscuros y senderos prohibidos.

Llevan los latidos el ruido escondido
El aire la pasión oculta
El beso la muerte que acecha.

Vuela fuerte y alto, metáfora de pelo castaño, que me vienes y me llevas
Pero rotas siento tus alas
Rotas de tanto viento, aleteo intenso, verde esperanza marchita en carne ardiendo
Aún asi vienes y te quedas
Y despacio el sentido te llevas
Lo sentido duro e imperativo, roca maciza atada al cuello frágil y en pleno beneficio de la duda, apuesta su cordura en contra del hogar
Las almas que, sinceras, llevan los latidos escondidos tras la carne
Pues impermeable es su nombre, su improvisación y su sonrisa esconden, de mutuo acuerdo, lo que mi imaginación busca
Y encuentra en latidos ocultos tras la ardiente carne

Los ojos como el fruto del olivo,
maduros de tanto ver,
pequeños y oscuros
intensos y jóvenes.

Las miradas furtivas mi morada
Y este poema
-sin quererlo-
vuela hacia ti teledirigido,
entre susurros y obscenidades que a solas asolan y en compañía atesoran.
Hacia ti vuela el sentido.
Y a pesar de los años, los más guarros, sucios, atrevidos, pervertidos, inscritos en la lista más negra del querer, rotos por el tiempo que pasaste sin ti, sin tu oscuro escondrijo, a pesar del pesar de los años más jóvenes y vividos, vuelan hacia ti las sonrisas que se escapan, sin permiso, de esta boca en flor en un día cualquiera donde risa y sonrisa se ríen de que sea broma el tiempo y el espacio, de que las almas atesoran el conocimiento y el amor de vidas ya vividas, dolores sanados, creatividad renacida.

Siento las huellas de tus caricias en mi espalda
como sienten las serpientes
a rastras
el camino a casa.
Allí donde manos rozan piel ajena siento caminos crecer y senderos prohibidos que llevan a mi cama
Sábanas en compañía.
Siento los besos ya fríos en los labios ahora secos del tiempo impío que corta quema y arrastra los cuerpos yacentes.
Los versos quietos a la espera de viento que los transporte siento, y poemas bajo tierra reflejándose en el valor de la semilla.
Siento la lluvia que aún no ha caído en mis rizos
agonía de un corazón curtido de latir.
Siento.
El roce de unas pestañas atadas a párpados inquietos que no dejan de volar,
que protegen y atesoran aquello que quiero
La mirada que sale del negro ver, que hace de mi alma abismos.
Que deja a oscuras este cuarto,
que funde y estalla bombillas, fuego apaga y calma inquieta.
Pues tus ojos están hechos de la más negra noche
Panteras en la oscuridad.
Ojos listos para cazar.
Y mi yo más valiente los observa de frente
mientras hundo mi cuerpo en el tuyo,
como quien sumerge las penas en alcohol para heridas.
Así es la noche juntos
Aunque fugaz y temeraria tu compañía fue,
las huellas de tus caricias siento aún en mi espalda.

jueves, 8 de febrero de 2018

Un corazón

Una comunidad de corazones reside en mi pecho

Una emoción por cada corazón y viceversa, universo, pluriverso, cada día uno nuevo, cada día uno menos, por las noches todos cantan en coro y su eco recorre cada rincón de este pequeño cuerpo que he elegido y su silencio dice que sienta, que si, que he venido a sentir, y a pulir lo que ya sentí, que el verbo sentir es mío y lo comparto con una humanidad que se deshumaniza y mata a sangre fría cada día un corazón cuando salgo a la calle donde los coches siguen sangrando petróleo
en esta ciudad cada vez me siento más fuerte y el compromiso con mi quehacer se enriquece
en esta ciudad atascada de gente me muero de soledad y revivo en una compañía que solo mi esencia individualista es capaz de nutrir

Para esa comunidad de corazones las emociones son simples renglones que cuentan en cada espacio una historia diferente
por cada latido un verso, distinto, en cada corazón vive una emoción, residen los miedos en la sangre oscura del corazón negro, un amor profundo como la noche habita la morada de mi corazón más antiguo, un amor maternal, fraternal, romántico, un amor amortiguador que siempre ha acolchado las caídas a desnivel que sufre mi alma cuando el negro corazón se ríe y hace fluir su oscuro saber por todas las venas y arterias de este cuerpo que ocupo

lunes, 5 de febrero de 2018

Escarbar entre las letras. Su escarcha sobre tierra mojada. Las lluvias seguidas, sí, se repiten como en rutina; dos días, dos dudas, sí, nocturnas. El color del cielo, naranja y negro, violeta también, sí, contaminado de luz eléctrica; así, por la noche en lluvia y por las noches en camino, recordando viejos versos, con el sueño colgando de los ojos y los sueños en las ojeras, noto el leve crujido del cristal de escarcha que separa el tiempo y el recuerdo.

martes, 30 de enero de 2018

Una emoción se idealiza y de una voz se hacen expectativas

El cielo toma unos tonos que no entiendo
El gris putrefacto de una carne infectada
El azul podrido de un charco muerto
Me cubro de mantas e ilusiones en esta cama

Me parto la cara, las ganas, las manos firmes
de una emoción que se idealiza, me parto la presencia, la estancia, la paciencia
una emoción que se idealiza en un cielo que no existe, ahora bajan unos humos a decirme donde estoy, a explotar la expectativa de voz y libertad que una emoción que se idealiza me ayudó a crear

Si tengo un corazón que late solo por una emoción, me lo arrancaré despacito por las noches sin que me vean los colores falsos, para no tener que mutar todas las mañanas de órgano, si un corazón muy bajito y delgado se hace de rogar pidiéndome una emoción que se idealiza, le arrancaré la voz de la garganta para escucharla de cerca y así saber porqué he de tropezar siempre con la misma piedra
Si de esa voz hago expectativas, y me explotan en la cara, tendré yo que limpiar de mis paredes los restos de su sangre y un torso ahora distante no será el cobijo para unas emociones que laten solas y estas palabras huelen a refugio interior de nuevo para el ruido que ahora entra por la ventana

Si idealizo una emoción y de una voz hago expectativas....

Si lo hago tengo que aprender
Hacer un ensayo interno de tantas experiencias juntas. Por una fuerza de atracciones magnéticas vienen en procesión los sucesos, administrados en cuentagotas o cataratas para un aprendizaje que tiene que cocinarse por dentro. Si lo hago, tengo que aprender de ello. Y no es prosa ni verso, se me van cambiando los dedos de posición y no hay pausas ni tiempos sino presencia, estancia, paciencia, y no me la parto contra nada

lunes, 29 de enero de 2018

Un camino largo

El día libre de humo y el viento en las orejas
Siento la rima atada en cadenas a la espalda, que relucen y brillan en plata como la sangre azul del pescado . . . su aleta dorsal que corta como la ausencia . . . los mismos versos recitándose en mi cabeza.

Siento la rima desfogada y desnuda
y me es imposible, sincera; dame tierra limpia
he de parar o me parto la boca contra la acera

Dicen,
recuerdo,
¿qué susurran sus labios de cera?

¿Pero quién? ¿Qué dices, chiquillo?
El corazón que siente o el que miente
el que encandila atardeceres y los apaga de un soplido
que le da fuego a una risa y la viste de lluvia cuando huye

Mi coraza es de hierro y el mismo corazón que siente lo sabe y alza altas sus torres y extiende gruesos sus muros siempre con el miedo besando su portón

El que miente, se miente. Sus palabras son tortura. Autoflagelación. Una cruz en la espalda. Como llevar la razón. No, para ti el ego.

Ando el camino más largo
mis pies caminan descalzos por alergia a la falta de contacto
dame tierra limpia,
porque llevo la paciencia de las tortugas y del que las espera grabada en la frente
sé que miente, y que siente
sé que me lleva a donde él quiere
y yo me dejo mecer y sucumbo a un aire que huele a desencanto
o es mi olfato de gato que falla cuando miente y cuando siente que lo que llega tarda menos cuando ando el camino más largo

Y sí, la vuelta se baña en mi sudor
el de la frente grabada y la espalda cargada
resbala, resbalo, rodamos montaña abajo cuando ese cuerpo es el monte de mi calvario y llevar la razón es una cruz
una religión más allá de las letras que pinto en el pecho
las tintadas con mi esencia
mi esperma, tu piel, mi lengua
mis caricias que son de fría piedra
como el corazón y su fortaleza.

Y sí, la vuelta se cuece en sudor, maldito el mijoter de la piel, constante, ardiente, dame tierra limpia de escombros y cimientos, por favor, tiempo muerto. El camino largo se extiende, dejo atrás la fortaleza y, descalzo, entiendo los kilómetros como poros y ya no me asusta sentir los latidos de mil novecientos noventa y tres corazones como si fueran una fecha que abriese las puertas de la vida y todo lo que ella implica, con sus miedos y sus deseos, que son lo mismo en mis sueños.

domingo, 28 de enero de 2018

Hay una realidad que vive detrás de la pantalla de mi televisor. Unas voces que asocio con orden, democracia, bienestar, unos rostros que me sonríen buscando llegar tras las ondas y los cables hasta mí y hacerme sentir seguro, estable, estamos en un estado civilizado, mira este niño muerto en el lago, mira esta mujer apuñalada, esta tierra desolada por las catástrofes, ahora mira que bien estamos. Bienestar y seguridad. Cómpralas. Soborna al ego desde dentro con un coche nuevo. Dame más. Dámelo todo, con tu presencia virtual diciéndome 'pais libre' y mañana a trabajar. Crisis, no, guerra sí, ahora una bomba aquí, dentro del cuerpo, tengo unas ideas que no entiendo y quizá me clave una bandera a la espalda o mi cuerpo a una cruz, la libertad oculta entre cadenas invisibles y calles cortadas. Dame seguridad con tu rifle aferrado al pecho. Dame confort contando el dinero. Ilusiones, un cuarto piso, qué buscamos juntándonos en una ciudad y alejándonos cada vez más los unos de los otros cuando sólo una pared o un silencio nos separa.

Si me saco las palabras con cuchara, porque estos sentimientos no entiendo, me invento un cuento por las noches para ver entonces si así el sueño que no se consigue con dinero vuelve a esta cama partida y me deja las palabras bien ordenadas junto a la almohada para que yo pueda ponerlas a bailar

miércoles, 3 de enero de 2018

De nuevo el formato en blanco se me antoja tenebroso: la cavidad bucal de una verdad que no puede hablar, la gruta de las maravillas perdidas en el gota a gota de la memoria.
De nuevo un formato extraño se me aparece en la carne: el dolor de una piel enfebrecida, recalentada por la fiebre, que viene a darme el calor necesario para los fríos y duros choques de la nostalgia en invierno. Volver cuando hay que marchar de nuevo.
De nuevo. Un formato que conozco. Se me antoja mentiroso. Me engaña y juega con la fiebre y con los signos ortográficos. Se rebela en sábanas sudadas, almohadas mojadas. El chatarrero, ha llegado el chatarrero, se recogen todo tipo de sentimientos. Los delirios febriles que azotan la calma de esta cama a punto de ser desconocida se alinean uno a uno en fila, esperando su turno en el paredón y su tiro de gracia, pidiendo que se haga del olvido un hecho palpable, y no algo deshecho e inalcanzable.

martes, 21 de noviembre de 2017

Aún no, no ha llegado el momento, la madrugada acecha, los recuerdos sin renglones ni reverso; por la piel aleatoria de un cuerpo va caminando el recuerdo olvidado, pretérito de este corazón, por las calles, los caminos, por la piel, va caminando el recuerdo cogido a la mano de la prudencia que tapa desnudez y vergüenza
y por la noche, cuando la madrugada acecha, me mantienen despierto todos juntos, con su risa irónica llena de memoria, hasta que encuentro un significado a estar despierto
no, no ha llegado el momento
hay un trozo de noche que vive con los ojos abiertos, se adentra en la memoria formando sus imágenes, sus sueños conscientes, despiertos.

jueves, 9 de noviembre de 2017

El juego de las pasiones

Cuando se adelantan los versos a los hechos en presente y no en pasado, hay una emoción en cueros que se cubre la desnudez con prudencia;

igual que los mil corazones rebeldes que quieren salir de este pecho, los versos rápidos se manifiestan en ecos, que vienen distantes, y susurran muy bajito las lecciones nuevas por aprender. Una voz consciente, que habla despacio, una voz que habla como si un arroyo fuera lo que de veras manase de su boca, invisible, interna. Los ecos de la voz, las mil voces o latidos que a la vez hacen su música y su destrucción. Y cuando se adelantan los versos a todo esto, porque la expresión se derrama en experiencia por los arrabales de mi alma, experiencia en presente, en pasado, es entonces cuando un futuro o un infinito se deforma según avanzan los segundos. Como el juego de las pasiones y los amores ridículos, detallado en el formato de la piel, que también se deforma en realidades aleatorias y más experiencias aprendidas. Como esos versos anexos desparramados por la ciudad, en las paredes, las hojas, los rostros, que se recitan sin quererlo en el aire y en las esquinas por las que floto, susurrando una sabiduría escondida en el interior, que despierta, como ahora, en un presente futuro en el que se idealizan las imágenes del devenir según los antojos más caprichosos del deseo. Es así cuando todo se junta en el pecho, los versos, el tiempo y el arroyo, las pasiones humanas, la sabiduría que entra y la que nace, todo como mil latidos en el pecho, mil conciencias con su propia voz, todo como emoción en cueros, valiente pero tímida, que aparta muy despacio sus manos que cubren la desnudez y la vergüenza, todos sus miedos rotos por fin, agradece la lección aprendida, el control, la administración de la emoción, sonríe a las nuevas experiencias por venir, y ahora en este futuro presente me da para escribir el formato de un nuevo día

Con la lección aprendida, la lectura se duerme al raso; no quiere cobijo
la escritura se congela con el frío del invierno; por la anticipación, el adelantamiento de los versos. Se congela por los besos recibidos y la ilusión de la que me han convencido. Hay una imagen, un recuerdo que parece que no he vivido; aquí una figura, ahora una ausencia, ¿es real? ¿es un pasado que no existe? las palabras escritas que no hablan de nada y solo se ocultan tras la pantalla de una necesidad impuesta. Con la lección de la prudencia aprendida, de guardar las emociones tras la lengua y los poemas en la cabeza, la lectura, la escritura, se congelan, se duermen, y yo me administro los mil corazones para que no se llenen de ilusiones según los deseos y los miedos que se manifiestan día a día en un presente, en este entorno cuesta arriba, con todos los frentes abiertos, en los que me tengo que curtir en singular.

viernes, 27 de octubre de 2017

La creatividad con la realidad

Con pus en la memoria, en el pincel que dibuja el sexo, una creatividad que gime y escupe las decisiones elegidas al igual que las palabras, los pensamientos, los pasos, una creatividad manchada de sangre y orina y latidos que se derrama lenta por los formatos de las partes internadas en la prosa de mi alma me viene a contar, reflejada, que las decisiones y la realidad se moldean una a otra dándose las experiencias diarias y engendrando expectativas, que ahora todo se me escupe y gime desde la punta de mi vértice creativo y ahora la realidad es creatividad según los senderos y los actos que elija

Con inseguridad en el corazón que late por otro, las dudas crecen y engendran miedos naturales e irracionales, de ausencia y lejanía, dejadez, penuria
Pero ahora la vida me da un latir distinto; se me ofrece la valentía como opción y le estrecho la mano fuerte.

lunes, 23 de octubre de 2017

Entiendo el sopor de la distancia, su ronroneo tierno acunado en kilómetros, entiendo que no se quiera incrementar la dificultad con deseos de cercanía, besos llenos de madrugadas en tu compañía, de flores de pensamiento; lo entiendo, para cada tiempo su lección.

Administrarme la emoción, digo yo, con la voz somera a ras de la almohada, engrandecida con la sonrisa cómplice de la confianza y ahora sé que esta estúpida distancia hará las veces de sino, que a su vez será el camino propio de cada uno y el pan duro que alimente los recuerdos.

Igual que deseo mi plenitud, así quiero tu esplendor, tu encuentro interior; afilar la oportunidad dando a cada tiempo su lección. Que si se me rebelan todos los corazones por la noche en un estruendoso latir conjunto, yo me pararé en seco la respiración y digo yo, administrarme la emoción, que en singular se manifiesta con su presencia plural, dando cobijo a tantas ganas de querer, en toda su conjugación de personas: primera, segunda, tercera cuando me saco el alma de paseo por fuera de la piel, primera, segunda, te escribo poemas sin quererlo en mi cabeza, y los freno como a la respiración para aflojar de un tirón todos los latidos y así conquistar de una vez esa administración interior.

Pero entiendo la misión de la distancia, en contraste a la cercanía en el recuerdo de una piel, no tan aleatoria esta vez, entiendo que hay que caminar este camino y dejarse llevar de una vez, como aquel sueño del puente y el río, por las sendas sinceras del presente.

miércoles, 18 de octubre de 2017

Mirada afilada

Que abre, que abro, la mirada raja en canal, fina e hiriente como el corte de un papel, precisa como el cuchillo del carnicero, que abre, que abro, que me da el entendimiento del mundo interior en el exterior;

tengo un ojo analítico y otro comprensivo
ambos se juntan en la piel extranjera de otros cuerpos, con la mirada afilada la abren, a ver que hay dentro

Y la costumbre, osada, la arraigada dentro de mi hígado violento juzga y encasilla; pero hay una conciencia que va por encima de toda carne y materia y me para en seco: 'quién puede juzgar', pregunta, 'tú, que vienes del banquillo de los acusados en las cortes de los contrastes entre dolor y alegría, que me tienes alta y serena, con voz de lluvia que chispea, tú, que me tienes siempre atenta' y no necesita signos interrogantes ni formatos. Como unos garbanzos en el bolsillo que me recuerdan su existencia al sonar y hacerse notar, yo me acuerdo de la costumbre violenta de juzgar según los parámetros en los que fui instruído dentro del mundo masculino de mi hogar, el anticuado, el que huele a loción de afeitado, a piel muerta y a café, y yo me acuerdo de ella, pobre palabra que sólo quiere significar, y como una lluvia que chispea viene la conciencia a hidratar la carne seca de mi capacidad de aprender para que no pare de brotar de ella una enseñanza permanente que no pretende juicios morales ni físicos, que solo tiene la mirada una capacidad y es la de abrir en canal la carne tras la vestimenta y comprender, analizar, aprender.

Porque hay un caos en cada ser que atrae, magnético, un caos de armonías en tonos fríos, terrosos, cálidos, caos metafórico, el tuyo huele a tierra mojada recién sembrada, a monte de pinos, a setas silvestres y sabe a ganas, a calma, a afecto. Lo toco y me da cobijo, me tapa con las mantas de mi cama, tiene un tacto áspero, como las manos de un carpintero, pero suave en su manera de transmitir calor, hay un caos en cada mundo interior del exterior que da conocimiento, rompe las costumbres podridas del subconsciente y abre las puertas de los yo conscientes que atentos se callan, se paran, y aprenden.

La mirada afilada, da un morbo que excita, siempre pueril e inocente, la curiosidad del gato que muere y yo la afilo cada día para poder hacer el corte preciso y fino que me dé el conocimiento de la comprensión,  el aprendizaje en la emoción, saber ser lluvia cuando toca y sol caliente, con el ojo analítico y el comprensivo actuando juntos en comunión, haciendo la mirada afilada, siempre buscando el interior.

jueves, 12 de octubre de 2017

La melancolía de una cama a medias, una noche de ciudad que como siempre se muestra sola y sin estrellas
esa misma, repentina, que se manifiesta en un lecho partido

Me pone la piel del revés para tener el tacto firme del interior, saber cómo se mueven mis músculos que sienten y no saben lo que es tener un roce ajeno;

yo no sé más que letras, ordenadas y expresando, palabras y voces muy bajitas que han sido desde que sé usar un corazón la única expresión que ha curado la herida profunda del recuerdo que se manifiesta con la misma escasez de vocabulario de siempre, igual que la sensación llena de un vacío negro y opaco, igual que las manos duras y sus golpes que arrancan alas, las palabras afiladas como espadas, ahora tengo que callar y cambiar esta piel de recuerdos y moretones tan tóxica que he curtido en veinticuatro largos años tan bien exprimidos.

Escribo esto en los márgenes laterales de mi alma, como en el colegio, en el cuarto infantil de las paredes azules, buscando entre sus líneas una respuesta que es efímera pero hermosa en su leve manera de ser

Me he perdido entre el humo de los coches
entre la oscura sensación y la ausencia de estrellas en la noche
unas voces minúsculas que intentan engrandecer el ego salen del televisor y chocan con mi frente
lo tengo que pensar, el sistema es así
si tengo un verso para sus cadenas, o si tengo una pena por sus maneras de abrirme la piel a tiras, tengo que pensarlo porque la razón ahora se me impone en lógicas cuadradas tras inhalar los humos tóxicos de esta ciudad
y no puedo tragar, la infección en la garganta es el mensaje, esto no entrará en mí; la cabeza embotada por la mucosidad cosmopolita, pegajosa y gris,
un cúmulo de nubes bajas y ácidas
tengo que volar, tengo que volar
hacer crecer de nuevo las alas

Yo no quiero el hormigón armado de los guardias civiles
prisas, relojes, ayuntamientos
órdenes y palabras vomitadas desde el televisor
No quiero un amanecer oculto tras las antenas
ni las lágrimas oxidadas de unos ojos de metal
las sonrisas por costumbre, la voz por necesidad
Quiero sentir, al despertar, la libertad de elegir, quiero un compromiso fiel a mis encalladas y pequeñas manos que tanto quieren trabajar un sueño real

No sé qué es escribir,
por qué me sale de las manos como esencia y sudor desde los poros
Tengo que hacerlo, tengo que volar, con las manos, con nuevas alas, con el pecho arañado por el recuerdo, tengo que escribir o morir

Si la miel que sudas se me queda en los labios, como el recuerdo de las sábanas colgando, entonces me diré 'paciencia' y la grabaré a fuego en mis sienes para no olvidar de nuevo que ese amor que viene de fuera no llega si el que surge de dentro se compone de retales, y solo piensa en puntos finales.
Pero hay una emoción tranquila que se esconde en mis órganos
no se trata esto de un poema infinito, va al margen de lo escrito
individual y subjetivo
es por mi, que fluye sin distinción de tiempos ni recuerdo, se acopla lentamente la emoción tranquila tras los tejidos de mis órganos que tanta organización conocen: piel, esquema, recuerdo y olvido como números que tienen que encajar, cada uno en un sitio; piel, esperma, las noches siempre queman, en el vientre se arroja el porqué de la esencia del hombre, del hierro fuerte que no corta y de las mismas palabras cada madrugada
Hay un ciclo que se repite con el sol y la luna
se buscan, se persiguen por los cielos
una metáfora que se me enreda entre los dedos
amor, el camino del amor
amor por mi, amor, por ti, por todos
amor a sangre fría, a bocajarro
se dispara desde un corazón al que le salen nuevas alas
las arrancadas; ay, los golpes
hay una poesía en tu mirada y una libertad que la guía
dame senderos de barro y nieve fría
despertares congelados entre las cálidas mantas
un cuerpo que gime y ríe y vive lento el tiempo
sin prisas ni ciudades ni manecillas
dame tierra que canta, tierra infinita, poemas también, te doy mis cicatrices y sus alas y te doy mi corazón y estas palabras
es todo lo que tengo

lunes, 9 de octubre de 2017

Tengo el ronroneo de un felino vibrándome en la garganta
no me lamas la nostalgia desde la piel
por la mañana temprana cuando amanece se mecen los versos de recuerdo y miel

Tengo el grito de un lechal en matanza acorralandome la memoria
los llantos y truenos de un bebé que llora por saber querer
Llora de nostalgia por algo que no ha vivido
que muere y nace en el mismo sitio

Tengo una prosa que se me insinúa en verso
juega con mi pelo y grita 'me quiero'
yo río de ironía y mullo la almohada de olor
Entre humo, petróleo, palomas muertas
sangres que hierven, aceras que queman, naranjos enfermos
Me duermo con el recuerdo del bebé y el lechal
me duermo porque se ha caído la madrugada encima del corazón
y quiero descansar la emoción

He sentido un miedo confundido
esencia de ladridos y mordiscos
Me impide el sexo, desconcierto, un miedo que conozco, sé su nombre, sé a qué sabe:

' desmerecido '

'los golpes
que le arrancaban, despacito, de fatiga
las alas, por Dios, los golpes
que le arrancaban las alas a mi corazón'

Hay una mano que juega con mi libertad como un niño con las moscas
El dolor de un apellido que aún no he curado, la ausencia de una libertad entre selvas de cemento y monos y versos y ahora una ausencia y un recuerdo. Tengo que volar, tengo que volar, tengo que sanar las alas.

Me cruje la conciencia y me arranca la sangre del miembro
se la lleva al corazón que late, hirviendo, he sentido un miedo confundido porque ya no sabe si tiene que asustar o su esencia de ladridos y mordiscos ya pasó de fecha y ahora la confianza sabe a 'merecido' porque el corazón de nuevo ha nacido y los trotes salvajes de las pezuñas negras se alejan indefensas sabiendo que su mensaje ha sido aprendido:

' el merecer tu querer y quererte hacer merecer '

jueves, 28 de septiembre de 2017

Filosofía barata de una erección involuntaria

Hay una imagen que es la carne, tierna; la piel tersa, suave, inmensa
El sexo de madera
Un placer que es efímero y monosémico
Un significado que no se extiende en la expresión de amor

Se define en el verbo tocar como las miradas lo hacen en la oscuridad, primero con torpeza; y ahora como manos certeras, que encuentran, evolucionando entre las sombras con cada movimiento, hay un imán que se conserva en secreto, una carne que es madera, pero efímera, ardiente, un placer que no llena, no dura

Hay una imagen que cambia a la luz de una vela,
un cuerpo aleatorio, mutante, en cueros y en llamas, la carne caliente, pide recorrer el camino húmedo de las esquinas de la piel, cubre un placer, pero sólo uno, sólo da uno
La carne tierna, esa piel tersa, suave, inmensa, hay un placer que llena y otros que no me da
Hay placeres que no son de carne ni de piel
hay unos de sangre, latidos, compromiso, todo lo que ése uno sólo no puede cubrir porque no llena de emoción o de agua todo el recipiente y se queda nada más en la base de la carne y la piel privándose de definirse por completo con el sentido profundo y sincero de la palabra 'querer'

Hay una erección involuntaria al corazón que se rebela y filosofa a base de carne y piel aleatorias que cuando rompen en un silencio tras la corrida se dan cuenta de un vacío no lleno que no es un agujero ni unos testículos descargados, un vacío que no se llena, un placer desconocido que no solo pide carne y piel y esperma sino esencia y un querer correspondido

domingo, 17 de septiembre de 2017

Hay una noche en concreto, no sé bien definirla, Lorca me besa en los labios mientras me desabrocha el cinturón, susurrando
'este amor que se muere en mis brazos'
pobre inocente corazón

lates solo por una emoción, rimas la palabra pero no comprendes las pausas, ni las comas, sigue latiendo en coma como si tuvieras diez años, la eñe se esconde entre las letras y las raíces autóctonas y me tengo que reír

Es esta noche en concreto, tengo el fantasma de un poeta bajo la almohada, me susurra versos que no conozco ni conoce
improvisa un lenguaje con mi alma
me besa las llagas, me lame la cara, me recita de un tirón el poema infinito que aún está por llegar, esconde entre las sábanas la eñe y la tierra que me vio crecer y me dió la fuerza y la voluntad para cumplir con esta tierra que me da de comer

Tengo a un poeta en la garganta, me come por dentro si no escribo, veneno, dame veneno en esta noche en concreto
hoy tengo todos los versos en flor
un corazón que late solo por una emoción y mil más que bailan y follan, se rozan, se trasplantan, gozan en el barro ibérico de mis pequeños músculos y ríen porque hay uno en concreto que en una noche concreta todo el pasado en una emoción y late y late y ahora Lorca sube por mi ombligo y me río porque dice 'pobre inocente corazón' y suena a mi voz reflejada en su recuerdo y sus libros, yo que tengo hoy los versos en flor y al poeta en la garganta sintiendo los arañazos de la memoria en el pecho donde habitan los corazones que se salen del tórax para bailar al son de las velas y ayudarme con esta noche en concreto que no sé bien definir si no es con esto.

jueves, 7 de septiembre de 2017

Por unos muelles vivientes que crujen dentro de un colchón somnoliento pasa un reflejo que me recuerda sin quererlo a mis jóvenes huesos, también crujen de noche con el movimiento interno, cuando una emoción se cambia de corazón y pasa a ser un marginado e improvisado sentimiento que no quiere terminar de relacionarse por miedo al rechazo, intermitente miedo que cruje por dentro en pos de una costumbre arraigada fuerte en las tierras ácidas y áridas de mi conciencia. Truena por fuera una nube cargada de lluvia y yo, sin más dilación, busco el refugio interior,  pellizcando la voz a ver si no la estoy soñando, una voz que se desliza en prosa últimamente porque la pausa de verso me deja en coma demasiado tiempo y por las noches no consigo el anhelado sueño del que trabaja solo por un sueldo (en coma, estamos en coma: no lo siento; no, lo siento) es esa voz del recuerdo mío y egoísta, yo que trabajo por la labor, por el sudor, porque tengo que hacerlo, por el amor del verbo hacer y por aprender. Necesidad, hazme el amor, deshazme el odio, te quiero firme, el miedo, el dolor es mi lección, dame ese curtirse en la vida como el labrador que sabe que las lechugas no entienden de domingos ni días festivos y que las orugas son para ellas la metamorfosis de su carne verde igual que mi emoción que palpita y cambia de corazón cuando por unos muelles crujientes se desliza un reflejo de prosa y descubro estas palabras debajo de mi almohada o de mi lengua y vienen a decirme todo aquello que no me atrevo a pensar pero que cobra sentido en la improvisación del sentimiento, marginado en el baño, por miedo al rechazo, como en mi infancia cuando sólo estando solo podía expresarme sin miedo a las burlas, a los golpes certeros de un apellido, y ahora es todo lo que tengo.

Como las manzanas verdes de mi piel y mi infancia muerta, trabajo el interior ácido y blanco, fruto de una mutación entre mente y corazón, como los elefantes que pinto en las paredes de los baños laborales donde me refugio de nuevo buscando esa soledad y ese recuerdo que es lo que mejor se me da, tengo una memoria que no sabe olvidar, como estas letras improvisadas que esculpo en el frío mármol de la madrugada, tengo el cincel de la palabra en plena erección y no sabe callar y mis mejores versos tienen la carne hecha de besos, cursiladas y dudas, te lo digo porque lo siento, no me juzgues, no me frenes, déjame saber querer, amar fuerte, permíteme tu piel y el verbo merecer.

Me cambio al verso por la influencia de la noche
hay una estrella que conozco y que muere cuando la miro
cómo los ojos que se quedan fijos en un punto suspensivo
que cuelga de un fino hilo
hay un estrella que me ilumina el camino y me protege del golpe
no puedo mirarla porque se me va la vida en un último suspiro
hay un camino, una senda, una vida que elijo
quiero tus caricias en mi cálida piel
hay una piel que habito, que descubro en cada espacio, cada tiempo, cada abrazo
no me juzgues mucho si te cuelo un verso entre pecho y espalda
Es mi palabra, mi voz, mi lenguaje
Me cambio por la prosa más honesta que sabe recordar y que te quiere decir que la voz que sale de mi interior tiene un origen de poeta y niño encerrado en el baño que no sabe sino expresarse en el más puro y sincero método de la palabra, mi palabra y mi voz que son mi lenguaje, no me juzgues ni me frenes, es mi manera, mi camino, mi senda, es mi estrella que ilumina, que me evita tropezar con la misma piedra, que muere cuando la miro porque si lo hago es por la duda de su presencia y ya tengo que saber que la vida me cuida y que esta manera es de la que debo ser.

lunes, 4 de septiembre de 2017

'El cuchillo en la derecha y el corazón en la izquierda'

Tengo un incendio por dentro que no quema las dudas pero arrasa toda certeza
hay un extintor en la cocina y lo veo al levantar la vista y me río por las ironías de la vida
como que necesito las dos manos para comer y nunca recuerdo si el cuchillo va a la derecha o a la izquierda
me tiene que volver una costumbre a las dedos, a sus huesos, necesito las dos manos para comer y me faltan manos para escribir todo lo que tengo por dentro.
Como que tengo un incendio que aviva la materia negra de mi corazón más oscuro y nocturno
el mas solitario de todos
satélite de una emoción que palpita por si sola y no necesita nada más
estrella para una noche blanca
es el más pequeño de mi pecho y el más viejo

siempre de madrugada cuando siento nostalgia, un nombre que no soy capaz de pronunciar se manifiesta en el eco de una voz, tengo emociones empaladas en las estacas de mi pecho y allí fermentan dejando el olor a muerte que me sigue desde el nacimiento

Hijo de la muerte, te balanceaste entre la vida y el dejarla cuando abandonaste el útero, sembrando cáncer en los ovarios; hijo de la vida, estás lleno de felicidad pero solo cuando consigues perdonar el hecho de que viniste a esta vida a recordar con el corazón todo el dolor que arrastras, hijo mío, estás lleno de amor y no sabes amar, tu lección no entiende de compañía externa y solo se debate entre el querer y el saber
Y me muero de ganas por saber querer.

y de repente una ilusión viene vestida de amor y yo no sé que hacer, si salir corriendo castillo adentro, o arrancarle las ropas viejas del camino, decirle que llevo cien vidas esperándola, que me enseñe el significado del verbo amar. Pero no tiene rostro ni personalidad, es sólo una palabra, o tres o ninguna, o un nombre, y recuerdo ese sentimiento que siempre he tenido dentro, ese de soledad y nostalgia por algo que no tiene que venir de fuera sino de dentro y me vuelvo a debatir entre el querer y el saber querer y sé que el sacrificio está en las entrelineas de mis versos, lleno de paciencia porque se esperar, lleno de impaciencia porque no sé amar ni cómo se puede llegar a sentir algo tan bello y destructivo que de repente acaba con la corrida o con un adiós
( Hay un paréntesis para este poema, que dice, o no acaba y la muerte os vuelve a separar )

hijo de la paciencia, la carne se enfría en el plato, el alimento muerto que no sacia el hambre más voraz de mi interior, tengo el cuchillo a la izquierda y en la cabeza una voz que susurra 'diestro' se ríe de que se me olvide el mundo exterior cuando se me va el alma de este cuerpo tan humano y comienza sus paseos diarios por el refugio interior de los intramuros de mi castillo levantado en el corazón más niño de mi pecho

Una desconocida dice al pasar 'estem a la civilització' y me río en su cara fugaz que ya no recuerdo
la jungla de cemento con sus monos evolucionados y sus versos anexos
las ironías ahora me crujen los huesos de los dedos que olvidan la posición de los cubiertos y se me cae el cielo desde el pecho cuando siento un nombre acechando que, esta vez de día con el sol brillando y el interior lloviendo, se pone a jugar con los ecos y el recuerdo.

miércoles, 30 de agosto de 2017

Si hay una idea que de noche viene y me grita fuerte al oído ese recuerdo del padre sin padre, qué debo hacer, vida que premias la conciencia

la herida existe y el recuerdo sangra cuando una idea que arañaba el pecho del poeta viene de noche y me hace recordar las nanas rotas de leche tibia y sangre fría

dime entonces, pues no solo te imploro con letras blancas, vida, te pronuncio con mi voz más consciente y atenta y te pregunto y ¿me pregunto? si de verdad perdonar es, en el fondo, perdonarme

el muro que construí para protegerme de tu boca y de tus puños mide lo mismo que la distancia que me separa de él hoy por hoy

hay una diferencia entre quererte por sangre y apellido y quererme por ser yo el que ha elegido ser quién soy, un hijo de la infancia y la muerte, del dolor y la experiencia, ahora un hombre de paciencia y compromiso, voluntad y sacrificio, curtido ya en mil pedazos muy pequeños de cristales en el alma que arrastra el recuerdo de muchas vidas muertas y pasadas

hay una semejanza entre quererte por ser quién eres y quererme por ser quien quiero y debo ser
un aprendizaje para ambos
el romper los muros de la memoria olvidada y construir con sus restos un camino que nos lleve a lo más alto de la conciencia, aceptar la vida que la premia, que nos puso aquí tal y como elegimos ser, vinimos a recordarnos y a vernos crecer

Me dije, no hay poema, no queda verso, mi respuesta es silencio
pero también dije que me debes mil poemas, y me los sigo cobrando día a día
quizá sea cuestión de permitirse los versos, tú qué los has juzgado siempre con tu voz y tus golpes, porque simbolizan un espíritu que te arrancaron con la infancia que perdiste
ahora sé que no es cuestión de olvidar ni recordar, sino de enriquecerse con la experiencia, sonreír a la vida por su respuesta, y llenar infinitas páginas con los versos que de ella crezcan

ancianidad de tus arrugas, una sonrisa me rompe la fortaleza, me derrumba, me da de comer los restos emocionales de la basura, qué guerra de bipolaridad, qué nana más triste, su melodía impregna los muros de la fortaleza que creé en mi corazón para protegerme de tanto dolor, si hay una idea que viene a recordarla por las noches con sus uñas en mi pecho yo me digo, niño, hijo, crío, escucha su latido frío, su quejido tibio, perdona lo vivido, perdónate el apellido.

viernes, 25 de agosto de 2017

El cuento dulce del recuerdo y la muerte

El recuerdo se muere de nostalgia. El verano está llegando a su fin y todo el recuerdo de mi corta e intensa vida empieza a marchitarse junto a mis hojas, y ambos mueren de nostalgia, y yo también. Tengo un dulzor en lo más verde de mi piel, siempre pensé en que era suficiente para poder alimentar al mundo, pero esta maceta se me ha quedado pequeña y no puedo crecer más. No puedo creer más. Es hora de morir, morir de nostalgia por todo lo vivido y por todo lo que podría vivir. No puedo crecer más porque es el momento de enseñar esto que tengo dentro, y no puedo creer más porque todo lo he creído ya, creo en la vida y su lección, y aquí vengo a contarla.
Cuando llegue el amanecer será buena hora. Podré permitirme soltar mi última hoja cuando el primer rayo de sol la roce. El humano ha elegido una buena maceta donde vivir, da al este y el amanecer es tan hermoso que lo oigo llorar de vez en cuando, y yo me deleito con el sol pero me entristecen sus lágrimas. Es por eso que debo morir, para que sepa lo que es la dulzura.
Su maceta no tiene tierra, asi que el humano no puede echar raíces. Es blanca como lo eran mis flores y tiene franjas amarillas en el techo, como un campo de girasoles, y hay otros, otras personas, pero ellos no me miran como el humano. El humano me ha cuidado desde que me trajo aquí. Pero ahora tengo que morir porque hay una lección en mis verdes pero ya marchitas hojas que él debe aprender.
La metáfora está en el dulzor. Yo ya no puedo creer ni crecer más. Le he dado todo lo que tenía, si cogía una hoja para mascarla, sonriendo, yo sonreía abriendo mis flores blancas y echaba otra hoja para él. Le gustaba, y aún le gusto. Pero está triste porque tengo que morir, solo que no sabe que debo hacerlo para que así pueda aprender a apreciar lo dulce de esta vida.
Él cree que su sangre es amarga y por eso escribe tanto, así, como hace ahora mientras yo pienso todo esto, buscando la dulzura perdida entre sus recuerdos. La encontró en mis hojas y ahora sonríe mientras lo recuerda.
No quiero alargarlo más. El amanecer llegara pronto y mis últimos momentos quiero pasarlos en silencio. Solo quería plasmar mi mensaje y que así le llegue al humano, y le llegará, estoy seguro. Ya me colé en sus sueños una vez, cuando le mostré mi funeral, y el le dijo a su madre, la que brilla, que yo me había muerto de nostalgia. No tenía pensado morirme precisamente por eso, pero ahora sé que debo hacerlo. La metáfora está en lo dulce, para él simbolizo su tierra, sus raíces, y moriré de nostalgia cien veces más hasta que sepa que el dulzor lo lleva dentro al igual que sus raíces, como yo llevo las mías y mi recuerdo. Así sabrá que no tiene él que morir de nostalgia tantas veces, que con una ya le bastó, y ahora tiene que llevar sus raíces en su corazón y el dulzor en su sangre y a mí en su recuerdo, que he muerto solo para enseñarle ésto.
El crepúsculo ha llegado.

jueves, 24 de agosto de 2017

Oigo susurros,

'tu corazón es negro porque viene del fondo del mar'

Oigo voces que dicen, que recuerdan,
¿qué susurran sus labios de cera?

Si nace muerta la aurora y yo, por ser bozal en la verdad, me araño las heridas

si es así, si oigo susurros de un corazón que recuerda, de una voz de fría piedra, si es así es que es locura el atreverse a recordar a escuchar a hablar, a preguntar por qué susurran y gritan todo aquello que yace muerto en una tumba de versos.

miércoles, 23 de agosto de 2017

Bendita paciencia

Soñé contigo y con un puente
mis ganas de cruzar el río del amor me impulsan peldaños arriba subiéndolos de uno en uno, de dos en dos, de tres en tres
Tú llegas a la vez, pero por el camino largo, a paso lento, paciente, me enseñas en sueños un tipo de paciencia fuerte y lenta que llena de placer la espera.
Cruzamos juntos las aguas azul esperanza, rojos de pasión, por una verde emoción que cultiva dentro de mi alma corazones diferentes y pensamientos y lirios y te espero junto a las barandas con una sed dulce de felicidad e integridad plena de ilusión

por ese continente que albergas en los ojos
por ese mismo, por el puente y el río
te espero despierto con el sueño encendido

jueves, 10 de agosto de 2017

Sábanas y sabanas

Reescribir sobre el pasado y la emoción marchita con voz cursiva y experiencia florecida, me hace reír, me hace avanzar por la salida que lleva al sendero que sigue y sigue igual que los versos infinitos que se sobreponen unos a otros en montañas que se sumergen en la tierra del presente, cada vez más profundo, cada vez mas presente, versos que reescriben en el papel de ayer con la tinta del hoy

Si te cuelas en mis sueños como quien se desliza entre sábanas de seda para curtir y hacer un amor carnoso, entonces me desnudaré el alma cada noche para que tengas un hueco donde lucir tu azul y así tener yo en que pensar al despertar y así las metáforas y verdades de doble filo de los sueños serán el desayuno de los días perennes en los que las ganas de conocerte y reconocerte rugen como reyes de la sabana en mis adentros.

Volver a empezar, retomar la emoción varada en las letras aisladas

Armaré los versos más rudos con las letras más nobles que se me ocurran al momento, bien parías en camas de sangre y tinta, a la par que me armo de valentía

Empezar a entender el verbo volver, su significado que es el eterno regreso de un amor que nunca se fue
la imagen que deja en el hogar interior no tiene rostro ni personalidad
se oculta tras la piel aleatoria de un cualquiera, una expectativa repentina que solo es un recuerdo y un símbolo de esa imagen que deja en el hogar interior el amor que nunca se fue
siempre vivo, siempre conmigo: contigo, siempre encontrando, siempre buscando
ahora es un tú y en seguida es un yo
cambiante, mutante, nómada
así es el amor cuando se rie hasta que aprendo la lección de la diferencia entre expectativa e ilusión.

La ilusión mueve los versos
los mece con vientos estivales
de distancia y lejanía
la ilusión arma a los versos
de paciencia y valentía
es la misma que hace fructífera la espera

la expectativa crea monstruos de tiempo que se alimentan de los segundos, Cronos y sus hijos, ata a la voluntad con un lastre de pasividad que frena cualquier ilusión de querer, de poder y de deber, enmudece verbos fuertes y magnéticos, la expectativa ancla, buscando y maquinando un futuro que ni cabe en la cabeza, sentenciando el porvenir con miedos y deseos

La ilusión llena el corazón de querer, de poder, de deber, que se pronuncian fuerte y magnéticamente, atrayendo energías renovables para el propio corazón sediento de agua fresca y limpia que mana cuando quiere, puede y debe, la ilusión es paciencia, voluntad, ser comprometido con lo venidero, con la experiencia obtenida de los jugos de la espera, con agua bendita, la ilusión impulsa al corazón a beber cuando llega el agua y cura la sed, la ilusión no es realidad mental, llena de condicionantes y ego, de miedos y deseos;
la ilusión es amor, la expectativa es obsesión.

El eco de un nombre resuena como truenos nocturnos llenos de silencio y luna llena
Los poemas dejo a medias pues a cada latido fluye la sangre en vena trayendo nuevas metáforas a mi cabeza
Y noto crecer la hierba en el cemento, en la fría piedra, la noto crecer en las campiñas de verano de mi Andalucia
Y me digo 'sigue este camino, compañero, que te llevará al manar del querer'

pero no fue así, ni vino ni carne
sólo hojas secas y tierra de piedra
se quedó el manar del querer queriendo manar
helado el saber pero ardiendo por dentro
se fue así, sin más, para no volver, ni vino ni quiso venir, ni carne muerta ni viva esta vez
sólo la palabra luminosa baila en la lengua
no ajena a esta boca ni extraña a estas entrañas
palabra acostumbrada a morir en la voz y nacer en el silencio
así se contradicen los hechos y sucesos
¡nada vino! nada quiso llegar; pero nada, pez, juega con las palabras que renacen que bailan que tararean por las noches aquella canción de cuna que me asusta siempre de la misma manera

expectativas, y en pasado

domingo, 23 de julio de 2017

Recuerdo

Tener los recuerdos como una maraña de sentimientos plasmados en amores no natos y en versos cortos finos e hirientes; en sangre, en alambre, en papel

jueves, 15 de junio de 2017

El corazón no entiende de ausencias

Una verde libertad muere en mis manos
la caída la rompió y la nostalgia la mató
su lugar de sanación no admitió su presencia extranjera
'llama a los responsables de los jardines del alma
que suene el pitido largo y metálico del teléfono
qué recojan la muerte que tienes en las manos'
pero la muerte es dueña de la gravedad;
la respiración cae al mismo tiempo que su cuello, que descansa en mis dedos, y es la verde libertad la que muere entre ellos
las lágrimas suben de mis ojos al cielo
la emoción se arranca por fandangos, extendiéndose en el tiempo,

las lágrimas bajan de mi cielo al infierno
la libertad ha muerto entre mis dedos

Qué etapa se cierra y cuál se abre, porque todo principio tiene su fin, igual que tu vida y la mia, el sol y la luna con su día y su noche, las hojas del otoño y las nuevas de primavera vestidas. Y así, en mi vida, pensando y escuchando a tus vecinas, te pregunto, pequeño ser libertador, por la puerta que abres y la que cierras, te imploro el farol, la luz de la paciencia, como mensaje que eres y serás, enseña a mi corazón a entender la ausencia.

Para siempre la eternidad de tu presencia, de tus alas verdes que tan desconocidas eran para mi tacto, y la confortable sensación de calor que albergaba mi corazón cuando pensé que quizá tú sacrificio era en beneficio mío para hacerme entender y entender de una vez el beneficio de la muerte y la vida y su amor por la emoción que florece en la piel temprana de la mañana, con tu recuerdo libre y verde aleteando en mi memoria
para siempre la eternidad de tu presencia

'con tres heridas viene;
la de la vida, la del amor, la de la muerte'

sábado, 20 de mayo de 2017

Los poemas en este escalón fluyen solos cuando el descanso se cansa de ser y las tinieblas del cansancio son plomo en los párpados

jueves, 13 de abril de 2017

Siempre por la mañana temprano el anhelo es sincero
Me viene susurrando entre bostezos y legañas 'qué es lo que quieres'
Sin interrogantes
Cambia la armadura por encajes
Tienes el corazón en verso, pequeño pensamiento, siempre por la mañana el anhelo es sincero
Déjalo fluir, tú sabes, qué es lo que quieres
Vivir la libertad de elegir el compromiso, la fuerza para construirlo, la paciencia para mantenerlo, la voluntad de hacerlo eterno

Ya no sé escribir pero escribo

miércoles, 25 de enero de 2017

Estevia

La tristeza de las plantas se refleja en nuestra salud emocional y se mueren de nostalgia por las noches

miércoles, 16 de noviembre de 2016

Prosa del frío

Por las mañanas donde se desnuda el suelo y las paredes se pintan de tristeza vaga un alma somnolienta que gime y reza a la almohada. La ventana es escarcha y fuera la ciudad sin sueño sigue sangrando petróleo. Pero de dentro una voluntad que es de pétalo y hierro late fuerte como mil corazones hambrientos de sangre y vida. Me siento fuerte en mi plural sin compañía. El frío y la prosa que desprende no son suficientes para ahogar mi compromiso.

Las vueltas que me traen de vuelta me incorporan a un sentimiento de amor espontáneo al que no acabo de acostumbrarme, hablo de esa sombra de hombre que finjo encontrar en cada atracción sexual y emocional.
Algunos poemas se tornan en prosa cuando la realidad llama sus tres correspondientes veces a la puerta de mis adentros, en ese momento me siento débil pues la emoción que albergo en la piel que habito pesa más cuando el mensaje parece ser claro pero es niebla.

La prosa del frío me calienta los huesos en las tempranas y precoces mañanas que camino. Un trabajo que es alquímico, un despertar sin desperdicio, las clases en las que aprendo carácter humildad y hechizos. Las mañanas que mecen la niñez y la prosa del frío , son todo mensajes, son todo destino que elijo.

martes, 8 de noviembre de 2016

Versos del olivo

El poema del silencio;

el recuerdo que vuelve lento
una encina y un queso, vino, aliento
un recuerdo que no he vivido y un futuro que no escribo
olivo y verso hacen el poema del olvido

Versos del olivo
versos del olvido
todo lo que ha llovido ahoga lo que dejas
la infancia que luce sus colores en la madurez del alma y el cuerpo
la mente siempre atenta y la conciencia mas despierta
unas emociones florecen e inmarcesibles experimentan con los días salados y las noches dulces, obtienen un jugo escolar y un trabajo que es de sí, de afirmación y de aprendiz
de néctar piel y esperma son las noches que queman
los versos del olivo me cuelgan de la cabeza
aceite y miel se ligan en mi piel
esa miel que sudas y el despertar que viene
pareces tosco y otro torso, no el tuyo que no existe
uno que palpo y lamo
llamo con las manos en tu pecho
tres veces y tres meses que siento que no son manos sino pomos y que yo mismo abro y yo mismo llamo

'padeces de serranía ibérica en la sangre'
bellota y encina me crecen por dentro
un olivo también y un naranjo en flor
azahar y nariz en comunión
boca y aceitunas verdes y corazones de aceite
recuerdo y olvido
los versos del olivo.

miércoles, 2 de noviembre de 2016

Palmas y alegrías por el poeta y su recuerdo

Este ego contento
un orgullo que beso

y ese ego de cáncer y recuerdos

Ese otro que me nace dentro y me deshace cuando siento que la herida vuelve a las letras y las leyes fingidas de la memoria acuchillan mi almohada pensando que en ella residen mis sueños más secretos y profundos
ese mismo que escribo en las noches de sentimiento y puñal
ahora tengo poder suficiente para permitirme pararme a pensar y no sentir el frío beso de la muerte venidera
porque ese ego de cáncer y recuerdos yace dormido en el sentido contrario de las agujas de mi tiempo y forma;
materia y espacio no son nada ahora

Mis días son de nervios y las noches llenas de mariposas al pensar en las letras al pensar que me toca ensayar de nuevo la emoción que tumbada sobre la misma almohada me brinda la oportunidad de descubrirme de nuevo cada amanecer

las frases se escriben solas y me susurran verdades improvisadas

Palmas y alegrias por el fuerte poeta y su débil recuerdo
que ese ego ya no grita en mi garganta
esa ira no invade mi hígado ni puebla de presencia mi costado
la sangre no sale en naufragios de mis venas ni escuece en los versos finos de sincera plata

el león yace dormido en el sentido contrario de la cama
donde un día residían mis lágrimas
esta almohada es de fría montaña y cálida playa
sus sueños ahora se acumulan en mis ojeras y los llevo con orgullo y beso al orgullo y pasión y satisfacción personal de ser el león domador de su propia esencia salvaje.

martes, 30 de agosto de 2016

Quizá el recuerdo no sea de hierro
pero con sus labios y sus vigas estructura este momento
se hace infinito, improviso el verbo el sustantivo
El verano que paso subiendo por tus latidos
Cien años que no son de Dios ni de beber semen frío del cadáver que me acecha

Cien años que se cambian por tener y quererte
Quererme
Luego, que importa la muerte
Sino son las pieles que coso ni el tan siquiera que esbozo

¿que importa la muerte?
quiero tus palabras en mi pálida lápida
tu frente, tu pecho, tu mechón de pelo gris
tú que no vives y juegas a existir
a exigir el momento cuando lloro
cuando no soy nadie y me vuelvo del todo
me giro en derredor el corazón de piedra seca
porque el recuerdo es de hierro y las vigas y los labios destrozan lo que siento.

Vuelo raso por tus caderas
una piel bella de luz de estrella me ciega
acabo estrellándome contra ella

un llanto de bebé flota en el eco de un trueno
una tormenta me deslumbra de nuevo cuando solo el verso es lo que tengo y pienso,
si el recuerdo fuese de hierro,
si pesara más que el pesar de dentro,
la retórica y retorcida y malparida pregunta volvería de nuevo a flotar en el eco de un trueno sollozante

Y ¿me pregunto?

'pa qué interrogantes'

Cuando muere el poeta

a una boca llena de sangre :

parar las campanadas con el pecho sólo fue el principio;
sentir su eco en mis adentros me rompe los dientes y me nubla el tiempo
teje un intermedio en cadenas
me deja sangrando en la acera.

Caminar es volar si uno lleva al viento por compañía
que la noche me aprieta y veo el bordillo a ras de mi boca
Me pide que descanse las cervezas y que le escriba a tus caderas
me incitan a parir este poema
caderas sin nombre sin dueño sin vereda
escapo de ellas cayendo por la escalera
porque su eje es de tiempo y no de vértigo . . .
pero tú y yo sabemos que no hay caderas ni escaleras

Aún así el momento me llama a escalar por tu cuerpo como si mi alma estuviese cosida en enredaderas.

Me asaltan los recuerdos
quiebran las columnas del templo que duraron eternas en mi cuerpo y firmaron una paz inquebrantable entre aliento y boca
Susurraron sin querer verbos que no conozco y que aparecen en mi mente con el eco de una voz y de una campana que llora

De una vez y sin respirar recito la respuesta:
no conozco más salida que ésta
un arte que entiende y que se desentiende de vanidades y frías copas de agua turbia para paladares desérticos
espíritus que caminan muertos
caminos que son el espíritu de una muerte lenta y segura
alternación, alternativa, alternador
que cambia su voz por silencio
alterna el día y la noche sólo girando en la misma cama
no me extinguen ni las ganas que te tengo ni la desgana por tenerte
no sufro de cortafuegos ni de bosque
pero me alterno la mentira y la verdad en unas memorias prohibidas

cuando muere el poeta nace el poema
donde cae muerto su amor brota una flor,
un tulipán por la despedida
un pensamiento por el sentir;
sale un beso por el momento helado en el tiempo
un adiós en el hasta luego.

sábado, 27 de agosto de 2016

Gótica

En unas entrañas que huelen a siglos y a turismo de día pienso en esa tranquilidad que flota de noche y que muere en la luz
me susurra el paso de los años con voz de viento y campanadas

Cuatro cuartos y once balas
acaban en mi pecho recostadas
las once en la noche y yo tan pronto amaneciendo, sangre brotando de mi sentimiento, sangre galopando por dentro, sangre que es tinta y tinta que fluye en verso;
cuatro cuartos y once balas, acaban en mi alma grabadas

se proyectan sin querer en estas palabras
porque se improvisa el aire tras la esquina donde floto
escribe versos en movimiento que son míos y de ellos
pero no nacen de esta boca ni de este aliento
brotan de la conciencia universal que une pensamientos
¡Son tuyos y nuestros, vuestros!
de cabeza a cabeza van brincando mientras uno está soñando mientras se escriben al momento
nos describen
Sin que quieras te rellenan, te completan, sin que los sientas te sienten, te envían recuerdos, imágenes que no han vivido su tiempo, esperando al ser completo que les da cobijo en su cabeza
y les da forma en su corteza, en el corazón que late al ritmo de las alas que se baten.

Dentro de las entrañas góticas de esta ciudad que me enreda soy araña y mosca muerta
tejo mi conciencia con fino hilo de seda y dejo mi cuerpo frío en ella
destruyo lo que dejas por ser yo la araña y la mosca muerta

Negra bóveda sin estrellas
luces que a lo lejos iluminan su ausencia

Tranquilidad del gótico bajo un cielo negro
se rompe sin yo quererlo
el compañero me recuerda que yo vivo dentro, me dice vuelve ya pa dentro, tú, cocinero de recuerdos de recursos de esfuerzo
que me reclama el cliente a darle su alimento muerto
y me viene a la cabeza que el querer parir estas letras en las entrañas de esta ciudad vieja que se viste de etiqueta no es diferente a tenerlas ya mamando de mis penas mientras pienso en ellas y se escriben con voz de viento y campanadas de once balas,
porque el poema nunca acaba.

miércoles, 24 de agosto de 2016

Apellido intermitente

Si tuvieras que recorrer este silencio de madrugada sólo sintiendo, no sintiéndote ni sintiéndome, sólo latiendo latiendo y batiendo alas,
serías la gota que llueve o afluente que nutre
calma intempestiva y palabra nueva
Nacería tu orgasmo de mi carne o del susurro de los placeres nocturnos
¿Serías retórica?

Serías poema o manchas de esperma en la mente, el menor de los problemas, la maldad que como bomba cae sobre la humanidad y la destroza creando monstruos de sonrisa dormida y dientes largos de neutra plata, inertes y pobres
Qué serías, tú que no eres nada pero juegas a ser todo, si tuvieras que recorrer este silencio de madrugada sólo siendo y no sintiendo.
Un punto inminente que viene a recordar la ortografía del alma
que nace descalza en una boca escarchada y que se olvida de como se escribe sin tapujos ni pieles mudadas
yo sé que vendrías desnudo por dentro y vestido de penas, siendo lágrima de cataratas saladas para esta mejilla que se olvida sin querer del salazón cuando no quiere sabor a despedida, a pañuelo de estación.

Una vez mas me vuelvo del revés la piel y me arranco la voz para escucharla de cerca
me unto la carne dura de mi entrepierna con el tacto de tu fría lengua
en mis sueños muerdes y arrancas la mañana a golpe de madrugada, de calentón en plena huida, de guerra perdida, de lágrima fácil y salada

Y una vez más soy yo el que puebla mis heridas, gusano que teje mariposas muertas escondidas en el sueño que baten sus alas a la vez que late el corazón y llenan mi estómago de tu imagen y sonido, de voces y susurros y retórica retorcida, que me arrastra de los pelos hasta la salida más lejana, para que duela tanto que no sienta más nada.

Como digo el poema no acaba, leo y león me arropan en las noches solitarias
las sabanas no piensan en cubrir nada, ni piel ni pudor, ni sudor, ni tu voz contaminada
sólo el recuerdo me ata a esa casa
el apellido, la sangre coagulada
la lengua afilada que se desborda reventando el dique impío de tus palabras
pues todos mis versos llevan tu nombre sin yo quererlo
eres el aliento que los impulsa y los cuece a fuego lento
que me mece despierto en la cuna del tiempo
me asfixia con la almohada de los sueños imposibles
las rimas que no riman
las miradas que doblan la esquina de mi calle
las veces que me muero y las veces que estoy muerto
cuando no noto ese aliento
cuando no se si puedo, si debo, si quiero
cuando el calor me aprieta los galones y me hace sudar desde los cojones hacia dentro
muy dentro tu golpe y por fuera el destrozo
el cuarto roto, la ropa que no crece, de marcas y vanidad, cantidad, calidad sólo para tus conceptos
que mi cuerpo no tolera y siente alergia
regalos que no acepto pero recojo con mis dedos

yo quiero plantas y púas que me arañen las manos
que me recuerden lo vivo de la sangre y su escarlata
la pausa que llega inminente y que me esboza la inspiración
coma, estamos en coma
el recuerdo no lo siento
no, lo siento

Seguimos en coma
la relación sólo fluye por tu corriente
la mía hace tiempo que creo su propio afluente.

miércoles, 10 de agosto de 2016

Sin los galones no eres nadie

Concurso y feria de vanidades, dispuesta para arrancar la humildad a base de falso oro y más falso techo
Me sugieren palabras que no encajan ni se amoldan al sentimiento
Ni son puras ni putas
Ni florecen los cojones y me ofrecen en balde
porque sin los galones no eres nadie

Ego egoísta de un yo muerto
saludos desde el infierno de mis adentros
no,

no hay calor en ese mensaje.

Sin los galones no eres nadie, dijo la medalla al muerto en combate
pero sobrevuelan la tumba del ayer los mensajes transmitidos y testamentos no escritos
una bandera que ondea al viento y otra que yace envolviendo el pecho, el lecho, la tumba y monumento al tiempo
un cuento que no empieza y otro que nace muerto
o nace pesando un kilo y medio de palabras que no encajan ni se amoldan al sentimiento, puras putas de cuerpo entero, desde el alba hasta el crepúsculo, cubriendo la noche de velo e ilusiones, de morfina morriña y mordida en los galones, que me cuelgan de los años y se atan con cadenas de fría plata como el gallo a la mañana.

Me siento derecho y vela encendida, erguido de espalda y cuello, con la pluma empalmada y la tinta corrida, la vera de cuerpo y sábana que no distingue piel de escama
en mi España de galones y ego extendido llenando los dominios y los domingos de una mente abierta y brillante con falso oro y falso techo
excéntrico
pudriendo lo ya muerto
siendo gusano para un esqueleto.

Te quiero y quiero saber que sabes querer

domingo, 7 de agosto de 2016

No hay poema

No queda verso, mi respuesta es silencio
Puntos finales y no suspensivos
No suspenden ni acomodan
Sólo dejan nanas de sangre y leche tibia, una coagula y otra se enfría

Padre sin padre que rechazas mis adentros, no me quedan versos para ti, sólo esto
Un te quiero roto como mi yo mas pequeño
mil palizas y un beso luego
No me quedan huecos en la piel para tus golpes ni tampoco alma que puedas destrozar
Son veintitrés años ya y aún siento tu puño de hierro
Mi sangre cayendo y una hermana que llora
un nombre muerto y mi cuerpo en medio
mis dientes temblando y el recuerdo mojado
tu frío aliento, materia, regalos que llueves tras la pelea y que pretendes que curen pero solo agotan paciencia hasta que su propia esencia se hace eterna y ahora fluye infinita
misericordia para mis heridas, paciencia, quema las lágrimas y las larvas que infectan.

¡Soy hombre de hombres! No niño ni principito, ni principio, no más cuadros colgados en paredes azules ni más flores ni tampoco fruta a destiempo en mañanas llenas de silencio que sólo la radio y tu quejío quiebran

Me debes mil poemas y me los cobro cada día
Me debes heridas, sangre hervida, leche fría
Me debes una infancia y no un futuro
Te quedaste lo crudo lo duro lo adjunto a este alma
Te quedaste mi querer y devolviste nada

domingo, 31 de julio de 2016

Un verso por cada beso

Amor que llegas lento y acuchillas miedo temblores y templas piel y sangre
te escribo un beso por cada verso
Una caricia te regalo por cada momento, por el sentimiento que nubla pensamientos
por la lluvia de rocío y madrugada despierta que creas
por las ganas,
¡amor, las ganas!
Que me crece la mirada si son tus ojos su refugio
tu pelo pa mis dedos hecho
tu cuerpo, tu viento de aliento, tu nariz y tu cuello

Te doy un verso por cada beso
hagamos el humor por cada negro cielo;
mil veces me río .

Si quieres ser caricia en la noche fría, esa que congela hasta el aliento, alimento en el ayuno de la mañana desnuda, si quieres ser poeta de carne y hueso te concedo el concepto, el contrato de mutuo acuerdo,
estoy listo para caer cuesta abajo sin frenos
para matar de hambre a ese estómago que canta melodías de rechazo

acunemos y durmamos miedo ¡matémoslo!
de soledades pintadas las paredes
resquebrajarlas quiero, teñirlas de azul de cielo
sí, quiero

viernes, 29 de julio de 2016

Me gusta mas vuestro silencio que vuestra voz, segando y recogiendo emociones plantadas a mil kilómetros de distancia, hoz sin voz, voz tranquila, serena, amistad de labrador, corazón,  campo en flor,  porros, risas, la aurora que nos acuna y la tierra que nos separa, la brisa que mece, sol que quema y el mismo que derrite corazones; con versos os describo un cachito de lo de dentro,  dicen 'os espero sin silla ni tiempo'; que no os extrañe si mi voz hago palabra, cuando no hay calma y truena por dentro, adentro, muy adentro y por fuera también. Sur de sures y aires calientes, amistades perennes, guadalquivir y me tengo que decidir entre Sevilla y las alas y ¡ay! quien pudiera fundir en un perfume olvido y recuerdo.

domingo, 24 de julio de 2016

Raíces podridas de un apellido

Mi mejor verso en años,

no conoce tierra ni letras pero sabe de espadas y rosas
sabe de caricias que saben a despedida
a pañuelo blanco y lágrima bailando en las mejillas.

Mi padre sin padre muere entre fieras;

león domado soñado amado
me arranca la cara a lametazos
me grita al oído que me quiere y con una mano me roza el alma para con la otra arrastrarme por afiladas piedras
no eres tú quien vive en estas letras pues no conoces tierra ni esencia ni sabes de espadas ni rosas ni bailes
sabes a ausencia desde la infancia
a poema que sangra
a ego muerto y sudor en la espalda.

domingo, 17 de julio de 2016

Juicios y el instante prefijo

Aquellos prejuicios que juzgan mis sueños con larvas puliéndose los adentros y pus gris brotando como flores marchitas en la piel inundaron la noche prefija y anterior a esta que da vida a las letras de este texto

Texto de sexo en el que tú, caricia que precede a la pesadilla, amigo y amante que nunca amaste, me sigues como polilla cuando soy luz dormida y nocturna

y escapo de autobuses en marcha y puerta abierta y monstruo piloto
aquel que nubla y aterra latidos dormidos y almas despiertas
la pesadilla que no asusta pero inquieta
la misma vía de ida que de vuelta pero en distintas metas
sin quererlo yo te prejuzgo y juzgo sin pensar ni quererte
te tiro en marcha y ruedas sangrante por la carretera

quizás fueses monstruo de cabecera y quizás el que puebla estas cadenas
pero sin quererlo yo te prejuzgo y te pateo
sólo para desencadenar tu fiera albina y perseguidora
que rompe mi cuello cuando paro a descansar y despertar.

¿Qué me dice esta noche?
Qué susurra
Qué transmite y qué transita

que mi alma a veces es juez jurado y verdugo y víctima
pues eras un reflejo tú, metáfora de pus y violencia, tranquila hasta que te patean

¿Qué recojo en esta siembra?

Paciencia.

el poema podría ser tuyo si rimara con tu ausencia

jueves, 7 de julio de 2016

Amor laminado

Si no cabe un poema en un verso, de la misma manera que no me caben tantos corazones en el pecho, quién susurra en mis sueños y restriega su cuerpo contra mis deseos cuando el amor laminado lame mis heridas
Pero caes en las redes de un sueño de papel y al quererte y al querer hablarte la realidad llama tres veces a mi puerta y quema,
una por mi, otra por ti, y por la libertad de sentir 

Despierta una idea desde un sueño niño e inocente
esa que nutre a sus vecinas las hortensias
las amapolas, las rosas muertas
unas ganas inmarcesibles  y de eterna primavera
despierta la idea al compás del corazón marchito
unas ganas infinitas
un corte en el dedo, sangre azul, sangre naranja, cielo, infierno, recuerdo
despiertan las ideas de noche desde un sueño maduro y cómplice
uno que apuñala al padre
otro que nace sin él
y crece esculpiendo su marmoleo cuerpo a base de experiencia

jueves, 23 de junio de 2016

Cambio de estación

El otoño le grita a mis heridas que suelten sus caricias y sus hojas y sus emociones dejen volar
Pero el verano reina en el aire y el sudor me resbala la ilusión a la vez que entierra en su hedor el sentimiento

jueves, 16 de junio de 2016

¿. . . de qué color tendrá la conciencia?

Sé que sabes que brilla y que me haces brillar, lo sabes
Pero tú no entiendes el tipo de luz, si es de día o de noche
al igual que yo no se si eres hijo del sol o de las estrellas
si vienes de espaldas o de frente, valiente, si vienes desnudo o vestido de penas.

Hay heridas que no sanan y hay curas que matan
las vidas que no vivo me arañan la espalda, me gritan ¡escapa! pero me ato a la cama
las escamas que rasco no renacen y la piel mudada de alma se atasca en la garganta
porque sabe que su cuerpo es de nadie, no mío ni suyo
de nadie es el viento y la sangre que le late
sabe que la esencia es esencial entre las letras;
entré y me dijo quedate

Pero me ato a la cama y me sueño libre
las cadenas son de palabras y no de hierro
mordazas para bocas llenas de moscas
cosquillas en un paladar que llama a tu sal a tu sudor a tu esperma
a tu esencia

¿De que color tendrá la conciencia?
Alba o noche, carne o hueso, miento, siento, de que color tendrás la conciencia cuando sueñas

Será del color del mar o la tierra al despertar, del beso del rocío al verde esperanzado, o del que yo espero

Será tu esencia también una flor marchita o mis preguntas siguen cayendo en desuso

domingo, 3 de abril de 2016

Se sabe

Cuando no queda a quien escribir resurge del convencimiento interior el mecenas del verso
mi alma que crece al momento, estirándose desde la manta
maulla, ronronea, lame
no es felino pero asoma uñas y dientes y le brillan unos ojos amarillos

Prisión voluntaria igual que infierno por decisión propia; no hay cielo obligado ni quedan centímetros por conquistar en la almohada
bueno tal vez queden distancias cortas y palabras como espadas y sus besos marchitos; este poema de baño público, usado, sucio, sudado
a eso huele el viento que arrastra al recuerdo por las orejas
se que llega por defecto pero no defectuoso
por razón y tiempo
llega lento, llega
me lleva

Me eleva de nuevo
La brisa y el verso vuelven de noche
Son tan puros que pueden hacer conmigo lo que quieran , me han poseído sus débiles palabras
De repente me abandonan y tras ellas queda un olor a cansancio y a razón
No me gusta tener que pensar así lo que escribo, ya lo sabes

viernes, 25 de marzo de 2016

Boca que vuela

Si me estanco en una palabra que es muda y que baila en la lengua
que vibra y muerde la voz para dejarla con ella deslizante entre saliva y dientes
Allí si me estanco que haría el saber, tras conocer que su poder no es verbal sino que nace de un silencio fúnebre
como el que reina entre estas paredes, en mayúsculas cuando debe ser fuerte y sincero pero ahora es blando y ronronea

Será que no hay versos suficientes para expresarlo
ni se conoce alfabeto
pero el sentirlo es como sentir la gravedad aplastando el aire
y se me ahogan los pulmones en charcos de sangre;
quiero y puedo querer poder
es más sincero el anhelo cuando se tiene sed y la boca sucia abierta y llena de moscas

Pero los días siguen siendo días y pasan sin quejarse, rozando las heridas que deja su nombre y su tiempo

La boca arranca el cielo
El vuelo se corrige y la palabra cambia

el viento, idioma plagado de lamentos
eternos santos ya muertos
esperando una boca que vuela y que lama sus frías orejas
que llame tres veces a su puerta
y despierte lo que durmiendo espera

viernes, 18 de marzo de 2016

Tribal

¿Si fueran estas líneas de oro y no de madera,
saldrían de nuevo flores donde sólo queda tierra seca?

sábado, 13 de febrero de 2016

Papiroflexia

Las grullas acaban besando el suelo
Pues tu sueño no posee labios
O al menos no conocen el verbo que les da forma
Un besar más allá de egos y montañas
De lagos huecos por el azul de unos ojos

lunes, 8 de febrero de 2016

Sin titulo

¿Cómo debo tomarme, vida que premias la conciencia, el hecho de perder mis poemas en el vacío virtual?

Acaso fuese una señal de tu excelente plan, tu brillante cordialidad, será un mensaje en el viento, una acometida contra la discordia emocional que albergo por dentro
Una retórica brutal sin par que susurra lo obviado por las letras modestas que tímidamente escondo entre mis dedos
La infame sensación de nadar en una corriente divergente que no lleva al mar si no que da vueltas por todos los terrenos que le place, sin dar cuenta alguna de sus travesuras, sus giros en derredor, desde el ángulo más recto y puntiagudo de mi mundo interior al más redondo y sereno

Pero tu gentil mensaje capto al vuelo
lo real sucede en sueños
esta existencia es la prueba de ello;
venimos a buscar aquello que nos hace soñar
y lo que soñamos no es más que el miedo o el deseo de poder conseguirlo
cómo lo vivamos es el acento que da fuerza a su sonido
de frente y despierto
o de espaldas y dormido.

Este anhelo masculino me come por dentro y suena de fondo el mensaje en el viento
'corre niño hacia aquello que sueñas'

Jardín interior

El refugio interior, secreto y oculto, en el jardín que se extiende por dentro surgen las flores más brillantes y bellas
aquellas que crecen en la adversidad de la duda
de si tulipán o pensamiento
lirio o sentimiento;

Y florecen las ideas allí dentro
formación en expansión pero rompan filas que viene la emoción a arrancar de cuajo lo prohibido
la decadencia que esta vetada en la mente
y el destierro del corazón sordo a las tinieblas del ego negro concluirá
vendrán lentos los ojos más azules que he visto
corre que llegas tarde

Mi parada es la siguiente,

domingo, 7 de febrero de 2016

Preguntas

Llego del trabajo a la noche, la cama pide compañía
Y yo me pregunto, ¿que compañía me acompaña en las frías noches cuando llego del trabajo, más que la de mis poemas y mi propia vera?

Pero el sueño pesa más que el plomo
y con sus dedos traza cosquillas en mis párpados
que cansados del día se rinden poco a poco
pero no sin antes devolver los huesos rotos, no sin antes escribir en tinta de viento los besos más cortos
-los no dados ni recibidos-
lo que recitas en sueños con tus labios de cera
que queman y quemas las pestañas las cejas
las margaritas, los pensamientos, los tulipanes que robo en los jardines secretos de los sueños, quemas la ausencia de un te quiero cosido a preguntas que me hago al terminar el trabajo y de camino a la cama
donde les doy forma con palabras, metáforas y escamas mudadas
igual que los reptiles
como se muda mi alma cada mañana
desde el más oscuro escondrijo hasta esta piel que habito.

sábado, 30 de enero de 2016

Conversaciones efímeras entre miradas furtivas


Cazan y custodian
Charlan en silencio, un segundo
Y dos
O tres
Y se desvanecen entre la multitud

Yo me pregunto quién pregunta

Quién es respuesta en este instante en el que la voz es un susurro leve en tu cabeza y el silencio mana y fluye conversando entre dos pares de ojos, antiguos compañero de refugio para el mirar,  que se cruzan y entrelazan durante uno y dos o tres segundos y se desvanecen con estas letras



lunes, 25 de enero de 2016

Caballero

Conquista del terreno que abarca la mirada
La campaña que emprendo buscando lo azul de las tardes
Como un cabezota empedernido y cobarde
Te sigo y busco y hallo tras las conversaciones que manan de bocas alumnas
Esperando un momento en el que crear el momento que espero
De romper hielo y lanzarme al mediterráneo de cabeza
De bucear en esas peceras
Y ser fluido por tus caderas
Tu torso y tus piernas;

de ser quien yo quiera.

Caballero que valiente al silencio te aferras
Heme aquí en menester del bajar de esta cremallera,
bragueta inquieta,
del calmar de las ganas fieras y férreas
del palpar con la lengua lo que manos jóvenes no entienden, aquello que es miel para el saber //

\\ se me acaban los versos ;
Se deslizan por la boca
Y otra vez caen a morir al suelo
De la realidad siento el frío aliento
que huele a 'cobarde' y a 'niño que quiere ser caballero'

Aquí el querer es etéreo, y las ganas acechan las esquinas de mi cuerpo como presas del deseo que es fuerte y la calma va al gimnasio de la paciencia a entrenar la virtud que nos otorga la bondad y esa fuerza que nos hace valientes cuando el cuerpo es de gelatina y tiemblan manos con el exceso de velocidad subiendo la escalera al trono del amor honesto
un Yo Puedo claro y sincero que sale de dentro
un querer más allá del No Debo
pues los hombres bailamos desnudos en el desfiladero del miedo

La opresión y la presión ejercida por fuerzas malditas cae por su propio peso
Su nombre de hierro e imanes azules me pesa por dentro
Y el desconocerte es un desconcierto
Un concierto de luces sordo y muerto en los albores de la inocencia que quiere brillar pero nació demasiado pronto para el amanecer del nuevo amor
Es en las esquinas de esta habitación donde almaceno los poemas que llevan un nombre escondido tras las letras, apelmazados, mojados
Haciendo del sentimiento un bloque con el que construir el futuro que llega lento
Los caminos que noto salir y crecer, donde brota un verde esmeralda frío, se abren de par en par como la voz al susurrar un nombre para dar rienda suelta al amar correr y saltar
Caballero que valiente al silencio te aferras
me veo caliente y erguido subiendo escaleras
y heme aquí en menester del bajar de esta cremallera
que se atasca cada primavera
y resucita cuando tu nombre cae, como opresión y presion, por su propio peso
justo aquí dentro.

Orugas

Mañanas de rock sucio
Música ajetreada
Y en la cama dos horas y treinta y seis minutos en silencio
Siento cosas que echo de menos
Desde temprano cuando el despertador ruge al amanecer tocando la melodía que ahora vuela en mi cabeza
De rock sucio y transgresivo
extremeño

Nos recuerdo en vaivenes cuesta abajo
Saltando y arrancando el vuelo
Lloviendo de la tierra hacia el cielo
Orugas deslizándose por el suelo, de mente corazón y alma en cueros, de flor la piel y hojas el pelo
Recuerdo amistades de montículo y palabras, abrazos que son sinceros y que transportan los pensamientos de un ser al otro
como las miradas y los silencios
Las locuras y los extintores
Tu entiendes las palabras que no digo y las que digo reflejas con tu voz

Son tus recuerdos una alegría y cosquillas que alejan la idea de la cebolla y sus nanas no son tan tristes ni su historia escuece en la mirada, son y serán mientras duren estos versos en mi voz y la distancia no sea más que una ilusión

domingo, 24 de enero de 2016

Calor

Sueño de frío hielo que se derrite al despertar
Intento recordar el mensaje que su coraza oculta y se escapa como agua entre mis dedos

lunes, 18 de enero de 2016

Con la raíz del querer

Ayuno en la mañana
Y en el frío de los días se cuecen infiernos de invierno
Tengo todos los días la ilusión de encontrarte, de poder hablarte y comentarte la jugada
-que se me ocurre en esta cama-
Obviar las miradas las palabras las legañas por la mañana; como ayuno en plena cocina, mato de hambre a un estómago que canta melodías de miedo al rechazo
Costumbre en mi regazo, los hombres marchitos del jardín de mis memorias estaban siempre florecidos en mi mente pero al oler su esencia de cerca descubro que no es más que ilusión podrida causada por la ausencia de amor masculino que llevo por dentro y se manifiesta por fuera en forma de deseo irracional hacia el vello en pecho, barba, nuez en la garganta, voz de hombre entrelazada con mis ganas de sentir el calor que no sentí desde el lado más derecho de mi alma, el más recto y puntiagudo, aquel que la poesía hace crecer en el papel

El lado del hombre que de lado se desliza por la rendija del orgullo hacia fuera donde habita el libre amor y albedrío, manos tensas contra tensas manos y duras miradas de hierro forjado, imanol con imanes azules que inspiran y corroen las caricias que no llegan pero que aun asi siento en mi espalda
Las de unas manos de ensueño, que en sueño tocan y al despertar se resbalan como aceite y agua por la piel
Rompiendo esquemas y ronroneos de león
Haciendo de esta pena un poema y de este poema un problema y ya en vena el detalle al despertar toca sentir la carne que no está, que rompe y asfixia cuellos, mejillas enrojece e inunda con cataratas saladas
que no llegan a salir si no que van tras la piel,
en otra piel paralela a esta, que vive por dentro.
Y a través de la rendija que sale del orgullo se cuelan palabras e imágenes, a veces les abro la puerta, les doy guerra y les recibo con humildes gestos de bienvenida deseándoles una cómoda y eterna estancia en los papeles que transformo en grullas que despegan en mi mesa y alzan alas al viento de mi cuarto
Volando sobre aire de ventana que da al patio interior
Trazando ilusiones, omisiones de socorro bajo las sabanas, y recuerdos no vividos en mi almohada.

Por los pasillos que huelen a ajo dorándose en una escuela del sabor, te noto en la puerta y te me cruzas como estrella fugaz
Y no queda más que pedir un deseo

Lo más absurdo en verso hecho, pues no intercambiamos palabras sólo miradas escasas de poder
Pero tu aura es fina luz de estrella
Tus ojos recubiertos de mediterráneo son imanes azules para esta mirada metalizada

No conozco tu hablar más que de oídas
y sin embargo te dedico estas líneas
y he me aquí tumbado expresando emociones de un pasado aún no andado,
que yo mismo entierro en los mares del ego profundo y hueco, ese mismo que me impide romper el silencio y con dos cojones acercarme a tu lecho
tirarte los tejos
Y si cae el tejado por falta de peso, pasar de nuevo tras la rendija que huye del orgullo y sonreír andando de vuelta a casa
donde atraparé bolígrafos y sangraré erratas
lamiendo y sanando las llagas que me causan estas palabras.

sábado, 16 de enero de 2016

La isla del puerro con una lámina de ajo encima que flota en caldo a plena ebullición


Lo efímero del momento,
con la posibilidad de ser eterno, hecho letras líneas con sus puntos sus comas sus brechas
Susurra mi cabeza, o grita, o calla,
'habrá que hacerlo eterno'
Y aquí están las manos veloces
Precoces
Eyaculando estas palabras

¿Entienden los gatos el concepto de un beso?

Amor felino que inundas de pelo y áspera lengua las soledades
que maullas a las paredes a la comida a las manos
que persigues sombras, arañas carne ropa viento
Amor felino ¿entiendes de besos?
O únicamente los lametones son tu concepto;
tu sólido concepto.

Amor de invernadero
Orégano seco ¿entiendes de besos?
Cultivado en invierno, para ti la primavera fluye por dentro, orégano seco, plantas muertas, margaritas, pensamientos en el balcón, para ellos la primavera ya pasó dejó rastro de hojas secas que se sueltan llegado su momento
Como se suelta el alma al morir, cuando se puede y no cuando se debe.
Morir justo a tiempo,
justo a tiempo los coches tosen humo negro para blancas palomas
blanca luz que busca iluminar a otro Cristo renacido
Justo a tiempo la ciudad sangra petróleo
Atropellando gatos perros insectos
Almas arrastradas por el tiempo
Medicamentos para enfermedades invisibles
Pastillas de freno
Pastillas de azúcar para la falta de dulzura

¿Es el beso un concepto humano?
O del ser
¿Se besan el viento y las hojas al bailar, las perras con los perros al procrear, hormigas, cucarachas, se besan todos al despertar, se lo hacen lento y rápido y fuerte y flojo, son los besos concepto humano o del ser que invade la carne y mueve los sacos de huesos?
Las dudas corroen las preguntas escarban alma carne pensamiento siento el momento anclado en el tiempo, los besos marchitos, el orégano seco, un gato que se escapa otro que muere, o lo mato, besos felinos maullidos ladridos
Besos muy perros
De noche al despertar el sexo nos funde nos gratina nos hornea
Nos hace desear la noche eterna
Y en mi cabeza una frase '¿entienden los gatos el concepto de un beso?'

miércoles, 13 de enero de 2016

Madrugá

¿Qué es, tesoro? dímelo, muérdelo.
¿Será comida, alimento, gastronomía?
¿Serán vísceras, tripas, cristales rotos?

'Palabras de tinta y corrida
Lametón en plena huida
Como un gato mirón que lame sus esquinas
Saciando intriga
Curando heridas'

La vida gira, noto la rotación del planeta en mi cabeza que da vueltas, susurros que vuelan, comas encendidas que pausan los sentimientos, en coma, estamos en coma
La cabeza el alma la carne y yo
Corazón, manos, rodillas, huesos y yo
Estamos en coma,
y pausamos, queriendo, queriéndonos
Mi cuerpo mi alma y yo, la coma más lenta, y la siento deslizante por mi lengua, mengua, da vida, respira y traga saliva
Estamos en coma,
'no lo siento'
'no, lo siento'.

Los saltos más fugaces que son caídas de la cama al frío suelo estampado en flor gris y hoja verde sobre fondo marfil
Aquellos que del sueño despiertan, y duermes tranquilo por el retorno al colchón
Al ronroneo de Ulises
Esos saltos que arrinconan el saber y la duda en el mismo lugar, que despiertan de la vigilia para vivir el sueño, esos me vienen a contar este cuento, de palabras encadenadas, imaginación presa, duendes y tempestades. Por el sueño que es ligero, de seda, se desliza el alma en vela, cuando el cuerpo duerme apaciguado como océano en calma, comprendiendo sin que nos demos cuenta el significado de estar consciente, saltando de la cama para que el frío suelo nos despierte y recuerde, aquí estás, cumple lo soñado

Edredón conocido e inquilino por conocer que apareces con el atardecer, desconocido por olvido muerte y traslado del alma a otros cuerpos
Aún así me siento testigo del crecer querer del girar del planeta, y noto tu presencia tras la puerta, acercando la mejilla el cuello la oreja derecha pidiendo lengua

¿Qué es, tesoro?

¿Serán palabras acurrucándose en mi pecho, arañando como metáforas mi más sincera conciencia?
¿O son simples palabras que vomito de madrugada?
Quizá sea el poema que se cae
de la cama o del sueño, del suelo al cielo, que se desliza, joder, se cae,
tras una tregua con la lengua y de madrugá,
entre mis dedos.

viernes, 8 de enero de 2016

Ronroneo

Qué fue del viento que hace de vientre

¿Me pregunto?
Parió tempestad
Acunó una calma inalcanzable en días de borrasca
Soles marchitos
Amores malditos

Ronroneo de un corazón felino, te escucho entre suspiros, gemidos, ronroneo que apaciguas, ronroneo que calienta
Verde edredón verde oliva, negra cara, blanca mirada, sucia el alma
Las uñas me clava
Y no es mi gato el que araña

Lo más guarro en verso.
A más plateado, más semen, más esencia
Orgasmo
suenan campanas se inunda la piel barniza el silencio en un viscoso saber.
La prosa que ilusioria se acerca en rebelión contra las pausas es la misma que por esta cama se pasea desnuda de madrugada, susurrando lentamente, en verso, las metáforas más pausadas, sentidas, la prosa que de noche se viste de verso es la misma todas las madrugadas, me inunda de recuerdo de silla y papel y lápiz y sangre en las manos
Y en el corazón, sangre azul de tinta que quiere escribir, escribir . . .
Escribir
en verso la prosa
y saciar a la bestia que las ganas acecha
que ronronea, me pide poemas,
-la coma en su sitio al igual que la piel-
me reclama ama gana en batalla
Me calla

Y de silencio se barniza el sexo
entre prosa y verso

jueves, 7 de enero de 2016

martes, 5 de enero de 2016

Acariciando ortigas y riendo entre sauces llorones

Vértigo y escalones y cojones

Empiezo a rezar en verso, a pensar en verso, a sentir en verso el beso;

'Amor temporero que creces en invierno,
noto tu frío y tu ronquido sordo.
Sabes que vengo de la tierra del calor del sol del orgasmo
No me juzgues si me equivoco cultivándote cuando no debo
Son las semillas de las miradas palabras roces que me dan tierra y entre el sol que por dentro brilla y la oscura sensación de equivocación brotan del suelo sentimientos azules
Brota lluvia del suelo
Arrancándote de cuajo
Amor temporero
Amor que creces entre la maleza
Déjame la piel al menos ya que te llevas la emoción'

Piel de ortiga y sauces llorones
Siento tus cojones palpitando tras la bragueta tras los calzones
Siento que laten más fuerte que dos corazones
Que sólo quieren amor temporero en horizontal,
en un lecho partío en dos.
Amor de edredón sábanas y sudor.
Pero sigo fuerte en plurales sin compañía
Y no busco la salida tras la corrida
Mas paisajes y menos pasajes en tu biblia del amor maldito
Sanar alas rotas no puedo, no es mi empresa, alas rotas que sienten el cielo más pequeño cada día
Yo no soy Icaro ni tu eres el sol
Más bien pícaro y tú sólo un solsticio

Manos inquietas buscan y manos firmes encuentran

viernes, 1 de enero de 2016

Si la duda hace señas ahogamos la certeza

Dudas certeras, de pies enredados, cosidos a preguntas
Sin respuesta las noches
En vela y a la deriva
Son las dudas que me abruman

Dudas que son piedras
Dudas dardos dudas al centro de mi cordura
Me entran y salen
Me susurran abandono miseria nostalgia
Palabras cadenas miedos
Penas lechos vacíos frías almas

Dudas certeras que venís de madrugada, se de vuestra esencia, escucho vuestra llamada
Sin embargo me digo paciencia voluntad compromiso
Valores de los que no se duda
Valores que no se acuestan con las dudas
Valores de valor de caballero y dragón
Se que hay miedo terror de abandono miseria nostalgia
Pero soy fuerte en mi plural sin compañía
Y me dejo llevar guiar mecer por la vida
Que me dice camina
Canina
Descose las dudas que ahogan corduras

Transeúntes...